Poco espacio pero mucha luz...

Cuando nos toca mudarnos a una casa o apartamento con habitaciones o áreas comunes -como sala y comedor- pequeñas de repente no sabemos cómo amueblar o ambientar los espacios para que luzcan más amplios de lo que realmente son.

Igual ya llevas años viviendo en una estancia pequeña, que a su vez luce oscura y andas tropezándote con los muebles. La buena noticia es que hay unos cuantos trucos para que, literalmente, “veas la luz”.

Para empezar, despeja las ventanas. Deja que pase la luz natural con el uso de cortinas tipo ‘sheer’, ‘roller shades’ de ‘screen’ abierto o simplemente, unas de textiles en tonos claros y ligeros. Trata de que las piezas principales, como sofá, cama, butacas, comedor y/o alfombras sean en tonos claros y neutrales, como blanco, crema o gris.

Usar materiales como las maderas en tonos claros y el vidrio -sobre todo en mesas, pues provocan transparencia- son otras recomendaciones a tomar en cuenta. En cuanto al mobiliario, evita los sofás o butacas de brazos anchos, así como las camas de respaldos altos o muy trabajados. Mejor que sean lineales y sencillos.

Tampoco se recomienda el uso de textiles con estampados muy grandes, utiliza mejor sólidos o estampados sencillos, como líneas. En este tipo de ambientaciones es cuando más presente deben tener que “¡menos es más!”. Mientras menos piezas de mobiliario mejor. Mide primero, pero seguramente no necesitas un juego de sala completo con sofá, ‘loveseat’, butacas y mesas. Mejor selecciona piezas sueltas y seguramente con un sofá y una butaca, o dos sillas, logres una zona más cómoda y funcional.

En cuartos para niños o invitados considera una ‘daybed’ que va a un lado de la habitación, así maximizas el área y también tienes la alternativa de utilizar el espacio de camita inferior como gaveta si necesitas ‘storage’ adicional. No olvides que el color de las paredes siempre ayuda a reflejar la luz. Escoge si posible entre el blanco, el gris bien claro o el ‘ivory’.