‘Ottomans’ multiusos..

Por Eileen Rivera-Esquilín

Tienen la versatilidad de poder cambiar un estilo decorativo. En una ambientación más tradicional, pueden impartir un poco de modernidad. También pueden agregar color, patrones y texturas. Y es que los ‘ottomans’ son elementos de larga vida en los espacios actuales.  

Conocidos antes como ‘foot stools’, hoy día pueden verse en pareja frente a una cama, de grandes dimensiones sustituyendo la mesa de centro en la sala o ‘family’, y en combinación con pequeñas mesitas auxiliares para aprovecharse como asientos adicionales si llega más visita. 

Si ese es el caso, recuerda seleccionar piezas de textiles duraderos y de fácil mantenimiento como la piel, el vinilo o demás materiales resistentes y repelentes. Los capitoneados son muy utilizados también en ambientaciones contemporáneas. Los podemos ver en distintos textiles y formas, sean redondos, cuadrados o rectangulares. Los redondos pueden ayudar a romper un espacio muy estructurado y lucen muy bien en el centro de cuatro butacas dando un efecto de área de conversación. 

¡Ojo! Antes de comprar uno, debes tener en cuenta cuál será su uso. Si será una pieza transitoria o multiuso, verifica que su material te permita sentarte constantemente en la misma y si su material es antimanchas.

Ten en cuenta también las dimensiones. Antes de comprar, asegúrate de tener las medidas del área disponible. Si el ‘ottoman’ será utilizado como mesita, asegúrate de que sea firme para que lo que pongas sobre la pieza no se vire, aunque siempre son una ayuda las bandejas decorativas que consigues en el mercado para este uso.

Además, no pases por alto en qué área será utilizado. Para un ‘family’, puedes escoger una pieza divertida, funcional y práctica. Si es una sala, la pieza debería ser más elegante o formal. Pueden utilizarse para ambientar, sostener iluminación, comer o colocar revistas o libros. Se ven muy bien en entradas, en pasillos anchos, al pie de la cama, y si son más pequeños, hasta en el baño.